De hecho se dice que en un sistema dinámico “la única constante es el cambio”. El cambio es la base tanto del crecimiento como de la destrucción. Así, el cambio puede ser un problema o una solución de acuerdo con el impacto que tiene en el sistema. Poco cambio puede llevar a estancamiento y rigidez. Mucho cambio puede crear caos y desorden.
La adaptación y evolución efectivas son el resultado del equilibrio entre cambio y estabilidad. Hay distintos niveles de cambio dentro de un sistema. Para los seres humanos, el cambio puede ocurrir al nivel del entorno, del comportamiento, de los pensamientos, de nuestras creencias y valores y de nuestra identidad. Cada nivel de cambio involucra diferentes dinámicas y poseen distintos impactos sobre uno y sobre su vida.
La habilidad de manejar con eficacia el cambio y fluir a través de las transiciones se refiere a desarrollar tanto estabilidad interior como flexibilidad en todos estos niveles.
http://www.aepnl.com/articulo.asp?id=157
Asociación Española de PNL
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